Los hijos del sol
Contexto histórico y significado
La obra «Los hijos del sol» de Máximo Gorki, escrita en 1905, refleja los sentimientos sociales y políticos de Rusia a principios del siglo XX. La acción de la obra tiene lugar durante la primera revolución rusa, y explora temas de la intelectualidad, la responsabilidad social y los dilemas morales. A través de sus personajes, Gorki muestra la brecha entre la intelectualidad y el pueblo, sus diferentes visiones del mundo y la incomprensión mutua. La obra tuvo un impacto significativo en la literatura y el teatro rusos, convirtiéndose en una obra importante para comprender los sentimientos sociales de la época. También subraya cuestiones eternas de la existencia humana y la elección moral, lo que la hace relevante en el contexto contemporáneo.
