Trainspotting
Estilo y técnica
El libro «Trainspotting» de Irvine Welsh está escrito en escocés, un dialecto del inglés escocés, lo que crea un sonido y una atmósfera únicos, sumergiendo al lector en el mundo de los personajes. El autor utiliza la primera persona para la narración, lo que nos permite conocer más de cerca los pensamientos y sentimientos de los personajes, haciéndolos más realistas. Irvine Welsh juega magistralmente con el cambio de perspectivas, brindando la oportunidad de ver la trama desde diferentes ángulos. Hay una gran cantidad de lenguaje vulgar y jerga, lo que subraya la posición social y el estilo de vida de los protagonistas. La estructura de la narración es no lineal, lo que permite a los lectores armar la trama como un mosaico y percibir de nuevo los eventos ya conocidos.
