Cyrano de Bergerac
Contexto histórico y significado
La obra «Cyrano de Bergerac» de Edmond Rostand, estrenada por primera vez en 1897, se convirtió en un evento cultural importante, ejerciendo una influencia significativa en el arte teatral. Revivió el interés por el drama romántico en una época dominada por el realismo y el naturalismo en el escenario. El protagonista, Cyrano, se convirtió en un símbolo de nobleza, ingenio y amor desinteresado, lo que lo hizo uno de los personajes más memorables de la literatura. La obra inspiró numerosas adaptaciones, incluyendo películas, óperas y musicales, y sigue siendo popular gracias a su mensaje universal sobre la belleza interior y el amor verdadero. Rostand logró crear una obra que combina elementos de comedia, tragedia y drama heroico, lo que la hace relevante en el contexto moderno.
