La leona blanca
Estilo y técnica
La novela «La leona blanca» de Henning Mankell se distingue por su compleja estructura narrativa, en la que se entrelazan varias líneas argumentales. El estilo del autor se caracteriza por un detallado desarrollo de los personajes y su mundo interior, lo que permite al lector comprender más profundamente los motivos y acciones de los protagonistas. Mankell utiliza un lenguaje realista y rico que ayuda a crear una atmósfera de tensión e incertidumbre. El libro contiene elementos de thriller y detective, lo que lo hace emocionante y dinámico. El autor maneja hábilmente los flashbacks y el cambio de perspectiva para revelar gradualmente la trama y mantener el interés del lector. Recursos literarios como el simbolismo y las metáforas también juegan un papel importante en la creación de la profundidad y la complejidad de la obra.
