La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina

Estilo y técnica

«La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina» es el segundo libro de la serie Millennium de Stieg Larsson y se caracteriza por una trama dinámica con un gran número de personajes. Larsson crea magistralmente una intriga compleja, combinando elementos del género detectivesco y drama social. El autor utiliza un estilo de escritura directo y conciso, lo que hace que la narración sea fácil de seguir, a pesar de la complejidad de la trama y la abundancia de detalles. La estructura del relato está diseñada de manera que el lector es introducido gradualmente en el curso de los acontecimientos, disipando el misterio en torno a los eventos principales del libro. Se presta especial atención al desarrollo de los personajes, lo que permite comprender mejor sus motivos y acciones. Larsson utiliza hábilmente recursos literarios para crear tensión y mantener el interés del lector, incluyendo abundantes diálogos, numerosos giros en la trama y descripciones detalladas de los escenarios.