Todo cuanto amé
Estilo y técnica
La novela «Todo cuanto amé» de Siri Hustvedt se caracteriza por una estructura compleja y de múltiples capas, que combina elementos de drama familiar, intriga y reflexión filosófica. El estilo de Hustvedt destaca por la profunda elaboración psicológica de los personajes y la atención al detalle, permitiendo al lector sumergirse en su mundo interior. El lenguaje es rico y elegante, con un uso frecuente de metáforas y simbolismo, lo que otorga al texto una cualidad poética y profunda. La autora emplea hábilmente flashbacks y cambios de perspectiva para crear tensión y desvelar los secretos del pasado. Recursos literarios como la intertextualidad y las alusiones vinculan las historias personales de los personajes con contextos culturales e históricos más amplios. La estructura narrativa es no lineal, lo que permite desvelar gradualmente las complejas relaciones y conflictos internos de los protagonistas.
