El Cliente

Estilo y técnica

La novela «El Cliente» de John Grisham está escrita en el género de thriller legal, que el autor utiliza magistralmente para crear una atmósfera tensa y dinámica. El estilo de Grisham se caracteriza por su claridad y concisión, lo que facilita el rápido desarrollo de la trama y mantiene la atención del lector. El lenguaje de la obra es sencillo y accesible, lo que hace que el libro sea fácil de entender para un público amplio. Grisham utiliza los diálogos como herramienta principal para revelar los caracteres de los personajes y avanzar en la trama. Recursos literarios como el suspense y giros inesperados juegan un papel clave en mantener el interés y la tensión. La estructura del relato es lineal, con un conflicto que va en aumento y culmina, permitiendo al lector sumergirse más profundamente en el mundo de las intrigas legales y dilemas morales. El autor también presta atención a la descripción detallada de los procedimientos y aspectos legales, lo que añade realismo y credibilidad a lo que ocurre.