Historia de dos ciudades
Estilo y técnica
«Historia de dos ciudades» de Charles Dickens se caracteriza por un lenguaje rico y expresivo que transmite la atmósfera de la época de la Revolución Francesa. Dickens utiliza numerosos recursos literarios, como el contraste, el simbolismo y la ironía. El contraste es especialmente notable en la descripción de las dos ciudades —Londres y París— que representan mundos opuestos. El simbolismo se manifiesta en imágenes como la tejedora Madame Defarge, cuyas acciones simbolizan la implacabilidad de la revolución. La ironía se utiliza para criticar la injusticia social y la hipocresía. La estructura del relato es compleja y multifacética, con numerosas tramas y personajes cuyas vidas se entrelazan. Dickens también emplea inserciones retrospectivas y flashbacks para profundizar en la comprensión de los personajes y sus motivaciones. Un elemento importante es también el uso de motivos y frases recurrentes, lo que otorga al relato un ritmo y refuerza su impacto emocional.
